Se denomina ecuanimidad al estado mental de una persona capaz de reflejar equilibrio y estabilidad emocional aún estando en medio de una situación extrema que pueda generar un desequilibrio psicológico. La palabra deriva del latín y significa imparcialidad. Se refiere a una actitud equilibrada y constante a lo largo del tiempo, más allá de las circunstancias que nos rodean, tanto positivas como negativas. Las personas ecuánimes se caracterizan por ser individuos estables emocionalmente, capaces de tomar decisiones correctas y asertivas ante situaciones complicadas. Son personas que tienen la virtud de ver lo que es importante ante cualquier situación. No se dejan influir por sus emociones.
No debemos confundir ecuanimidad con indiferencia, son dos actitudes distintas. La indiferencia conduce a la no reacción, en cambio la ecuanimidad impide una reacción apresurada, automática y ciega. Es un mecanismo de verificación y un sistema de auto regulación que impide respuestas extremas y poco adaptadas a la realidad. La ecuanimidad facilita que la mente esté en calma y atenta. Adoptar una actitud ecuánime permite a las personas ser capaces de aceptar aquello que está ocurriendo. Pueden determinar lo que realmente está sucediendo, más allá de lo bueno o lo malo que esto conlleve. Esta claro que hay situaciones que son irreversibles, es imposible tener todo bajo control, pero ser ecuánime nos permite desapegarnos del dolor y del sufrimiento y también de la felicidad extrema. Una persona ecuánime se libera de estos extremos y pasa a llevar una vida de calma y equilibrio. Comprende mejor todo lo que experimenta.
La ecuanimidad conlleva la imparcialidad. Nos capacita para emitir un juicio equilibrado y justo de los hechos.
Es una poderosa energía de precisión, cordura, armonía y equilibrio. Aunque también es compasión. Nunca es frialdad o desinterés o falta de sensibilidad. Yo equiparo la ecuanimidad a vivir esféricamente. Se trata de vivir en el presente, libres del pasado y del futuro, sin reacciones de avidez o aversión. Es no aferrarse a lo agradable y no añadir sufrimiento a lo desagradable. No implica una actitud de quietud mental absoluta, al contrario, la vida esta llena de permanentes conflictos que nos afectan constantemente. Se trata de intentar fundirse con el flujo de la vida cambiante. Si consigues liberar la carga psicológica que toda emoción lleva, entrarás en otro territorio, una zona en la que incluso puedes llegar a disfrutar del placer de sentir esas sensaciones sin que te afecten.
Siempre me gusta hablar de mis experiencias. Tengo una larga carrera profesional, primero como abogado y luego en puestos de dirección. He viajado por medio mundo por trabajo. He sufrido para alcanzar objetivos y he sufrido mucho como empresario. Además los últimos años de mi matrimonio fueron un tobogán emocional de extremos absolutos. La imparcialidad brillaba por su ausencia. La calma mental parecía prohibida y la indiferencia se adueñó por completo de la relación. Ante este panorama ser ecuánime era una utopía. Parte de sus principios ya los estaba aplicando, con resultados muy satisfactorios para mí, pero incorporar la practica total de la ecuanimidad a mi forma de vida me ha hecho dar un salto importante. Adiós estrés, adiós apegos, adiós a emociones extremas de felicidad y de dolor. Adiós a patrones y conductas tóxicas. Adiós a cargas psicológicas contraproducentes. En fin adiós a muchas cosas. Realmente creo que el cambio experimentado ha sido total. Hoy puedo llegar a disfrutar con emociones negativas que antes me mataban. Ahora soy yo quien controla estas sensaciones. Ser imparcial en mis juicios me permite juzgar de forma más justa y también me hace ser más compasivo. Esto me encanta. Estoy descubriendo a un Pablo desconocido. Mucho mejor, más feliz consigo mismo y que hace más felices a los demás. Soy consciente que todas las personas deberían apostar por su crecimiento personal. Cualquier filosofía, técnica, practica, etc. es válida si te es útil. Yo te aconsejo que profundices en la ecuanimidad. Si lo haces el retorno que obtendrás será inesperado y muy agradable.
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